Puntos gatillos y Punción seca

Es frecuente cuando llega un paciente a nuestra consulta que nos comunique que tiene la sensación de tener una “pelota” o un “bulto”en alguna región corporal, que le impide moverse con normalidad, que le duele y que en ocasiones esa sensación dolorosa no esta fija en un punto, sino que se irradia o se extiende hacia otras áreas del cuerpo, es muy posible que si nos encontramos ante un cuadro clínico similar  el responsable de dicha sintomatología sea un punto gatillo (trigger point).

Los PG generan una gran diversidad clínica y pueden ocasionar diferentes patologías, como determinados tipos de dolores de cabeza, problemas musculo-esqueléticos, desordenes temporo-mandibulares (bruxismo), o confundirse con radiculopatias como un síndrome ciático.

¿Pero que es realmente un punto gatillo?

Como definición académica podemos decir que un punto gatillo “ es un foco hiperirritable dentro de una banda tensa  de un musculo esquelético que provoca disfunción y dolor de una intensidad variable “, habitualmente  tambien se emplea el término de «contractura  muscular», aunque la diferencia entre PG y contractura muscular, estriba en que el PG sólo repercute en una pequeña area del músculo, mientras que la contractura es el aumento generalizado del tono en todo el músculo.

Esta situación genera una alteración vásculo-nerviosa  de esta zona en la se crea un exceso de sustancias que mantienen en constante contracción esa región del musculo.

Es decir, es un pequeño nódulo de uno o dos centímetros cuadrados dentro de un musculo y que genera dolor, con lo cual podemos decir que es un problema muscular y por sus características es reversible.

El 40% de nuestro peso corporal está constituido por el sistema musculo-esquelético, el cual está sometido a diferentes situaciones de stress, como pueden ser mantener determinadas posturas  durante largos periodos de tiempo, la práctica deportiva, nuestras actividades laborales etc, todo esto son condicionantes para originar una sobreutilización de determinados músculos  que se hallan en un estado permanente de contracción  y la posible aparición y/o perpetuación de puntos gatillos.

Desde la mitad del siglo 20 se ha investigado mucho sobre este tema y en la actualidad conocemos la ubicación exacta de los PG de cada uno de los músculos que generan esta patología.

Tratamiento de los puntos gatillo

Existen diferentes técnicas de tratamiento para los PG, las cuales se dividen en técnicas invasivas o conservadoras.

Principalmente se diferencian en el aspecto de que en las técnicas conservadoras el fisioterapeuta nunca atravesara la piel, mientras que en las invasivas  por el difícil acceso o a la profundidad en la que se aloja el PG es necesario superar la barrera cutánea normalmente con una aguja que nos permitirá llegar hasta el lugar de la disfunción, esta técnica es conocida como punción seca.

¿Qué es la punción seca?

Como hemos descrito antes la punción seca se encuentra dentro de las técnicas invasivas para el tratamiento de los puntos gatillo, nuestro objetivo con esta técnica será alcanzar el PG patológico y producir con el efecto mecánico de la entrada de la aguja una destrucción controlada del mismo, y con ello liberar y restablecer la normalidad del tono muscular en esta zona.

Se deben de practicar con unas medidas  de higiene adecuadas como es la utilización de guantes por parte del profesional y la limpieza previa de la piel de la zona a tratar.

Es una técnica muy eficaz y segura  si se emplea correctamente, podemos usar la puncion en casi todas la zonas de nuestro cuerpo, por supuesto se debe realizar un diagnóstico previo y acompañar de otras técnicas de tratamiento más globales para evitar posibles recaídas.